Partió a tierras lejanas, partió y sin decir adios. Se ha llevado consigo verdes praderas del mas fino pasto, se ha llevado ilusiones, se ha llevado mi pasión.
¿Que se hace cuando se va tu musa? La espera es interminable, a solas duele la nostalgia, la expectativa crece y la infinidad del tiempo se acrecenta y se vive.
Se ha ido mi musa, el misterio es grande, entenderlo es complejo vivirlo es tormentoso...
A mi musa
8 de mayo de 2007
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
15 comentarios:
Tu musa no se ha ido, solo esta lejos y siempre piensa en ti, si tan solo la distancia no existiera, todo volveria a ser lo que antes era.
Disculpad la ausencia de acentos y la de su musa tambien
bueno.... nada es eterno....
tenemso dos opciones, o vuelve o se ha perdido para la eternidad..
si es asi, el destino te entregara una nueva
saludos
bye
Pues que decir? la distancia es una prueba de amor. Si se puede con eso nada es imposible. Vale la pena el riesgo. Sin embargo el futuro no esta sellado. Si ha de ser juntos uno se reencuentra con su muso.
por que todas las musas deven irse lejos, la mia escapa cada semana a pachuca...
que extraño, la musa de Lalo en Pachuca y la mía en Toluca,,, la de Tovar en...? ok evitare romper el suspenso de esto y decir donde esta... pero recomiendo pasiencia y mas que eso... amor
Curioso, Dr. Tovar. Muy curioso, ya que yo también he escrito algo muuuuuuuy parecido, hace tiempo ya. Desde que mi musa se fue, mejor dicho, desde que la dejé ir... Sabe a que me refiero, ¿no es así? Luego le enseño dicho poema... sólo a usted, porque se me hace interesante la comparación que podremos hacer en cuanto a la ausencia de nuestras musas. Un abrazo!!! Pesetas!!!
Una musa…yo extraño el tener una…realmente me sorprendió tener un comentario tuyo, a decir verdad te he leído ya varias veces en tus blogs pero no me había atrevido a dejar un comentario, lo más seguro es que hayas encontrado mi space desde el blog de Ethel, yo también supe de ti por ella, pero por lo que me platicaba, aun no conocía tus blogs, tu fuiste la persona que me faltó conocer cuando fui a la UP, en fin, gracias por tu comentario, ten por seguro que seguiré leyéndote, tus posts siempre son interesantes.
La partida de la musa es tan necesaria para la inspiración como la luna en el cielo. De alguna manera sabemos siempre que está, pero esa sensación de no percibirla físicamente alimenta la vena que ha de derramarse en tinta.
Pensaba que la partida, la nostalgia y la añoranza aumentaban el amor... hasta que me pasó... es difícil.. pero estoy de acurdo en que sin situaciones como estas sería difícil escribir... Quizá sea masoquismo, pero creo que tiene algo de encanto esta soledad enfermiza... no?
Niño: Se me olvidaba. Gracias por tu coment en mi blog...los extraño cañon, no dejes de visitarlo y comentarlo, ok?
Jaja tantos comentarios tan pensados y yo sólo pude pensar en una cosa: tu musa ignorante sólo anda de parranda como dice ella mesma (en su honor jaja) allá arriba. Pero, ¿quién la necesita? Jojojo (yo... dammit!! jaja).
Ya hablando en serio, hoy en día, aunque se habla poco de musas, es posible encontrar aunque sea una, y todos las tenemos. Las pobres, tan hermosas y útiles, inspiradoras de músicos y pintores. ¡Cuánto le debe la humanidad a ellas!
En sentido estricto las musas eran mujeres que dotaban de inspiración a los artistas. Ciertamente tú eres un artista, pero creo que la musa no necesariamente es una mujer, o por lo menos no una mujer amada como Chano aparenta decir.
Yo no sé mucho de tu vida últimamente y bien podría ser la falta de cierta mujer lo que da razón a estas líneas, sin embargo sé que tú anhelas inspiración cada segundo de tu vida, sin importar de dónde provenga ésta, y me baso en las últimas palabras de tu entrada para emitir un veredicto, si acaso una simple especulación... Parece que tú no buscas a cualquier musa, tu buscas a tu Melpomene.
¡Bah! ¡Las musas...! No pasan de ser un mero pretexto poético, inspirador pero descarnado, ideal e inaccesible desde que murió Gala, la única mujer mitológica.
Querido garcín altoalcázar:
Serán un pretexto poético e inspirador; más no me dejará mentir al decir que todo aquel que gusta de plasmar algo de sí en cualquier tipo de manifestación artística, busca siempre alguna fuente de inspiración, eso siempre es el objeto amado puesto que sería difícil la existencia de la belleza si no se amará algo. Ya sea la mujer amada o cualquier otro aliciente que usted desee, una musa se verá encarnada aún en el más pequeño objeto que mueva nustra pasión.
Tienes otra musa gracias a su ausencia, y a veces ayuda hasta más: La soledad
Suscribo a Ociósofo. Sugiero escuchar "Soledad" de Jorge Drexler (¡qué canción!).
A la luz de tu ensayo recién posteado, y según un imperativo categórico kantiano: en los demás reconoce a fines, no a medios. No puedes convertir a alguien, ni al amado, en un pretexto poético (eminentemente): estarías mediatizándolo. Ahora bien: por supuesto que la amada termina por convertirse en pretexto poético.
Con todo, ama la soledad. Esa sí que es pretexto poético.
Publicar un comentario