28 de enero de 2007

Sueño de una noche en el paraiso

Deambulaba por los jardines del mundo, no tenía ní mantenía un rumbo, el susurro de las doradas espigas silbaba a través del aire. Los hermosas amapolas encontraban bellos rincones donde adormiladas me miraban. El cielo, azul, las nubes aborregadas avanzaban pesadamente a través de tan hermoso lienzo. Nevados picos se extendían más allá de lo que mi vista era capáz de observar. Ebrio de alegría comenzé a correr, me alcanzó la noche; hermosos fulgores despedían las juguetonas estrellas. Es ahí donde atiné un ¡Te quiero!.

El rocío decendió, la mañana nos encontró abrazados y ella comentó un -Yo tambíén-.

24 de enero de 2007

Triste al alba




Siempre pensando
Ensombrecida la mirada
Como un lejano compás melancólico de Beethoven
bajo el claro de la luna.


Siempre solo y pensando
pensando en ella
pensando en Bécquer
al menos siempre habrá poesía.


Espesas lágrimas recorren mis tétricas mejillas
Clarea el alba
Como siempre la veo pasar
Enmudezco, tiemblo
Se va, sufro, lloro, grito en silencio
en fin


¡Habrá poesía!


22 de enero de 2007

Descubierto

Solo estoy, la desesperación
Mi compañera de andadas
Solo estoy, la soledad
Como siempre me acompaña

Solo estoy, la depresión
Esa que por lo general
Vuelve mis noches cálidas y dulces en tristes y amargos desencantos

Solo estoy he imagino
¿Que es esta vida sino un mero devenir del tiempo?
Pienso, se me antoja un cigarrillo
Lo enciendo
El humo se proyecta sobre el fondo de la pared
Graciosas figuras juegan, se entrelazan
Me pongo melancólico

Lloro

Aquel humo el cual me infunde paz
Y cuyo sabor agrada a mi paladar
Me enseña el error en el que vivo
La vida es como el humo a veces dulce, a veces amargo
Es efímero, da vueltas, termina, se acaba
Solo estoy, eso lo sé
Y recuerdo mi melancolía y tristeza

Me descubro
La noche transcurre
Meditabundo trato de alegrar mis pensamientos
Más el saber que aquella figura que me infunde fortaleza
Aquel que da su vida por ayudarme
Llegará y le lastimare el alma con mis problemas
¡NO!
La vida no es más que el humo de un cigarrillo
Me descubro
Sé que estoy arrepentido, ¿Cómo explicar ese sentimiento?
Solo estoy
Nada me consuela, solo la esperanza de un futuro mejor
Solo estoy
Más no me siento desamparado




No dejare que la depresión llene lenta e inevitablemente mi ser
Despertare de este letargo
Mi libertad, hermoso don que acarrea responsabilidad
Solo estoy
Mis decisiones me pesan
Si solo me lastimara a mí sería más fácil de afrontar
El cielo llora, enloquece
Trato de reír
Más de mi ser solo escapa un leve sollozo en el cual escucho
¿Qué escucho?
El remordimiento que llena mi espíritu
He lastimado a un gigante
Siento su dolor y me duele sobremanera
No es la primera vez
Más no logro imprimir en mi ser aquellas enseñanzas
Sabias, amorosas
Me distraigo
Una vez más lo he vuelto a herir
¡Señor ayúdame a lograr sanarle las heridas!
No deseo infundirle más daño
Solo estoy
Tristemente descubro que todo es cierto
Me descubro
Al imaginarme a futuro deseo cambiar
Alegría
No, solo decepción

20 de enero de 2007

Historia de un accidente

Uno da gracias a Dios por un amigo; en esta ocasión con los nervios destrozados agradezco a Dios el haber conservado con vida a un amigo de un accidente totalmente irreal, era realmente increíble ver que había salido caminando del lugar del percance.

Uno se dirige al lugar del accidente rapidamente, es la primera véz que lo hago, al ir en el camino uno puede imaginarse miles de cosas, pero al llegar uno no puede evitar cierto sentimiento de culpa, impotencia, coraje, pero sobre todo miedo. Al estar ya a unos pocos metros y comenzar a ver las cosas, no pude con el miedo, quería llorar, rezaba, no se que tanto corrí pero cuando lo ví, sano, y sobre todo, con vida no pude más que agradecer, me quebré...

Los amigos son la esperanza que nos ayudan a seguir nuestro camino

17 de enero de 2007

Historia de un engaño

Oscura la noche, de aquellas en la que los fantasmas del alma encuentran eco en los oscuros callejones de la vida, fría como pocas. Al final brillaba tristemente una farola que iluminaba la entrada a uno de tantos antros que tiene la vida.
Con paso resuelto me dirigía a darle forma a las distintas penas que atacan mi alma, no lo sé, la compañía aunque amarga acompaña.

El lugar era deplorable, pero tan familiar; trago a trago despache mis pesares hasta que llegó el engaño. Decidido tomó asiento frente a mí, ufano y soberbio pidió de beber. Nos mirábamos fijamente como quien presiente lo peor.

-Mi rival es mi propio corazón- comencé
-¡Inocente!- dijo riendo - la realidad te ha golpeado tan fuerte que te ha cegado-
-¡Mientes Engaño! motivos no le he dado para abrazarte, no me explicó por que me atormenta la Duda-
Riendo más fuerte aún dijo:- Voltea la mirada, observa como la Duda ha sucumbido ante la Verdad, en esta ocasión te hablo con Sinceridad y Rencor que nos han escuchado y han tomado asiento para departir con nosotros-.

Asombrado miraba como lo que decía el Engaño se covertía en Verdad, ¿sería acaso posible que me hubiese engañado? Me negaba a aceptarlo.

-Con Mentira te ha pagado- interrumpió la Sinceridad, muy segura de su comentario -más Esperanza tapa tus ojos-.
-¡Olvídala por siempre!- gritó el Rencor, pedazo a pedazo mi alma se caía ante tan terribles fiscales y yo, obnubilado por la Esperanza no quería ver, la Fé me mantenía en pie más la Verdad me golpeo en la cara.

Riéndo y gozándo, la Pena encontró la salida de aquel lugar y con la ayuda de las demás me sacaron a la realidad donde la pena encuentra un rincón en el alma, donde quema por dentro y pudre el alma. Lloré unos instantes, cuando la vida se me obsequió y encontre la salud no pregunte el por que, ahora que me han engañado y siento los minutos arrancarme el corazón demando una razón.
No lo sé, no le dí motivos, la perdí, me engaño.
¡Devuelveme el corazón que en besos yo te deje en la boca!

15 de enero de 2007

Me gusta


¿Sabes? me gusta pensar

me gusta pensar en tí y en la infinidad del cielo

me gusta pensar en el ayer

me gusta pensar en lo que es y no pudo ser

me gusta pensar en tí y en la infinidad del cielo.

me gusta...


Me gusta escribir y decirte que te quiero

Me gusta mas hacerte sonreir y que digas te quiero

Me encanta que sepas que te quiero.


¿Sabes? me gusta pensar

me gusta pensar en tí y en la infinidad del cielo

pero mas me gusta escribir y decirte que te quiero.

14 de enero de 2007

12 de enero de 2007

El título déselo usted





- ¿Cómo es posible que vaya a hablar sobre ese tema?-


-Pero... ¿Es que acaso hay algún inconveniente?


-¡Claro!, nadie le escuchará -


-Lo que necesito es un buen título-


- ¿Y cúal será? -


-No lo sé, aún no lo decido... el título déselo usted-


-Qué le parece ... -

9 de enero de 2007

Eso es música! (Para no plagiar a memo)

Cierta noche, frente a un cuadernillo color ocre de obscuras hojas, un hombre, de mirar taciturno y a la vez lleno de jovialidad, garabateaba su conciencia en las estrellas, que al mirarle le devolvían un resplandor. Pues el hombrecillo veía en aquellas páginas el reflejo de su amor. "Bendito Rachmaninov" pensó para sus adentros. He de verla por siempre a una distancia temporal, pide al tiempo que vuelva... vuelve.

La noche avanza pesada y pausadamente, solo una luz, como sacada de una canción de Lara ilumina mi pensamiento. Donde quedo el romanticismo del pasado? Por que no solo llevarle un dulce y amargo beso?. Hermoso compás que me transporta a una vida onírica, una vida con tango, una vida mejor.

Atardecer en el puerto, grupos de personas se reunen a beber una taza de recuerdos, se oye un rasgeo enamorado, inconfundible, es el amante que le dice a su novia, me gustas, !Por que sí¡ Por que eres linda, no se necesita más razón para amar. Eres linda.

Pero llega el implacable presente, se acaban las letras y las estrellas dan paso al astro rey, la vida reluce nueva y brillante, pero el brillo conlleva la verdad y solamente me quedan las ganas de ser libre amarrado a tus pies. De tenerte, de escucharte, ganas de soñar despierto, o simplemente de soñar y no despertar, pues tal vez despierte solo, no me despiertes ¿No ves que así soy feliz?

7 de enero de 2007

“… La vida, Toto, no es como las películas, es más dura, más difícil”.


He visto al fin una película que me había sido recomendada y de la cual mucho había oido hablar, "Cinema Paradiso" del director italiano Giuseppe Tornantore... me ha conmovido.
El tema: La vida de un niño en un pueblecillo italiano amante del cine en la época de la post-guerra proveniente de una familia pobre, con un padre desaparecido en Rusia que es instruido por la sabiduría de su amigo "Fredo", el cuál fungía como proyectista del único cine que había en el pueblo, el Cinema Paradiso. De gran corazón, el pequeño Salvatore "Toto", crece con la ilusión de ser proyectista del cine; impulsado por Fredo, desubre que uno puede llegar a ser quien uno quiera, encuentra al amor de su vida en una jóven que llega a estudiar al pueblo y que gracias a convencionalismos sociales, ve truncada la relación.
Llena de enseñanzas, un hermoso sentimentalismo y la fuente inagotable de inspiración que es el amor, la película va tomando forma, de tal forma que me atrevo a decir, todos se sentiran identificados con algo.

La recomiendo ampliamente, se ha convertido en una de mis películas preferidas, es la ilusión de un viejo que desea ver a un niño triunfar, es la facultad de esperar por el amor pese a la tempestad, es sentarnos en una butaca del viejo Cinema Paradiso y recordar.

"...Desde hoy, ya no quiero oirte hablar; ahora, quiero oir hablar de ti"
Fredo a Salvatore

4 de enero de 2007

Sabiduría de niño


Personalmente no soy un amante de las festividades que por fin encontraron término, no puedo comprender como es que en la cena de navidad la clásica tía que en todo el año no se molesto en saber de tu existencia se planta tan ufana en tú sala y se "alegra" de verte - ¡Mira cuanto has crecido! - y yo pienso - Pues claro en un año sin verme evidentemete cambiaría -.


No tolero ver a la gente disfrazada de una alegría y un amor disimulados, no soporto que la gente te desee lo mejor y por dentro puedan pensar lo peor de uno; y así me amargaba la navidad.


Sin embargo hoy una pequeña niña de entre 5 y 6 años en un cruce de calle se acerco a mi auto, su carita se encontraba sucia y sin embargo algo brillaba en su rostro. Camino a mi ventana acercándome un cochinito de plástico y me pidió "su navidad". Cabe aclarar que no acostumbro darle dinero a los niños pequeños pues por lo general, sus holgazanes padres los mandan a la calle a conseguir unas monedas.


Como el semáforo es algo largo le comente que la navidad ya había terminado que no era posible que pidiera "su navidad" a estas alturas. Con una sonrisa y una sabiduría de niño que me dejo absorto me contestó: - Pero, la navidad es diario por que hay que esperar con amor a diosito -


¡Madres! una niñita en una situación precaria con problemas mayores que los míos vive cual si fuera navidad todos los días. Le día las pocas monedas que traía y le obsequie un paquete de dulces. Me despedí con un - ¡Feliz navidad! - y su carita de ángel se ilumino aún más.


Ese es el problema, que uno deja de creer, la navidad se convierte en una tediosa rutina en la que irremediablemente hay que asistit a cenar con la familia, se convierte en portar una sonrisa fingida. En cambio para un niño es la espera de todo un año ( y vaya que es largo) portándose bien para que el niñito Jesús le deje un regalo a los pies del árbol, es ver dibujada en su carita una sonrisa por ver a sus primos, las galletas, el pavo y los obsequios; es la alegría de la navidad.


Let us store a little warmth and gentelness away

Let us save a little bit of Christmas for another day

3 de enero de 2007

am Anfang

Inspirado por Becquer, Neruda y Lorca; algo de Josh Groban, Sarah Brightman y Bach siendo al momento insitado por Rilke me he sentido obligado al mas puro estilo de Schroedinger a crear la realidad abriendo la caja.
Quisiera ser yo elocuente, hábil en la palabra, para escribir alguna máxima o pequeño comentario acerca de los acontecimientos que el presente nos brinda, algún comentario de la realidad... desgraciadamente, querido lector, no poseo ninguno de estos dotes de genialidad y hago entrega de un espacio un tanto patético.
Mas tiempo al tiempo querido lector, que esto... apenas empieza.