12 de enero de 2007

El título déselo usted





- ¿Cómo es posible que vaya a hablar sobre ese tema?-


-Pero... ¿Es que acaso hay algún inconveniente?


-¡Claro!, nadie le escuchará -


-Lo que necesito es un buen título-


- ¿Y cúal será? -


-No lo sé, aún no lo decido... el título déselo usted-


-Qué le parece ... -

5 comentarios:

Jorge L. Rodriguez dijo...

¿Y esto?... jajaja
Sabes que siempre escucho tu palabra, aunque esta sea un poco extraña de vez en cuando, e intelegible para un hombre que se limita a usar palabras simples y de un ramo en específico de la vida.

Anónimo dijo...

tiene el mayor gardo posible de bondad o exelencia...llega a ser un tanto profundo, tanto que es superficial,,,HLTG

Rodolfo de Habsburgo dijo...

¿El título? El título es como el telón de la obra. Un buen título dispone a la persona (lectora) a introducirse de una forma u otra, buena o mala, a lo que se ha escrito. El título puede engañar, puede persuadir, puede hacer reflexionar, le puede dar más profundidad a una obra. Aún así, el título no la determina. El título es un arma de doble filo: ayuda o perjudica, pero sólo desde el punto de vista del lector, porq un título, objetivamente, no hace a una obra buena o mala.

Anónimo dijo...

¿ha si? pues entonces el comentario déselo usted...

Anónimo dijo...

creo que vas descubriendo tu estilo (o almenos yo lo voy descubriendo) tu escritura te delata, síndrome de todo buen escritor, Velazquez, Quevedo, Tovar. Me gusta como escribes; las características que das a tus personajes, los sentimientos y las pausas que da tu puntuación; es una escritura con identidad; con personalidad... ¡Tovarismo!